Tal y como lo confirmó el director del departamento de prensa del Ministerio de Asuntos Exteriores de Eslovaquia, Juraj Tomaga, las autoridades eslovacas han expulsado a tres empleados de la embajada rusa en Bratislava bajo sospechas de actividad de espionaje.
A decir de Tomaga, los servicios de inteligencia eslovacos detectaron que las actividades de esos diplomáticos estaban en conflicto con la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas. "Además, ha habido un uso indebido de las visas emitidas en el Consulado General de Eslovaquia en San Petersburgo y, podemos decir que se ha cometido un delito grave en el territorio de otro estado miembro de la OTAN y de la UE", añadió.
Al mismo tiempo, la cancillería eslovaca reitera que está interesada en desarrollar las relaciones bilaterales con Rusia.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia ha dicho que Moscú responderá de manera recíproca, como suele hacer "tradicionalmente" en estos casos.