La reubicación voluntaria de menores no acompañados desde Grecia fue uno de los temas principales tratados por el ministro del Interior Roman Mikulec con la embajadora de la República Eslovaca en Atenas Iveta Hricová durante la reunión que tuvieron el lunes.
Se estima que en el territorio de Grecia hay cerca de 5.500 niños no acompañados, que cada día se exponen al peligro que supone el consumo de drogas o la participación en actividades delictivas.
"La República Eslovaca está siguiendo de cerca los acontecimientos en esta región. Llevamos bastante tiempo apostando por la solución del problema de la migración en los países de origen. Seguimos estando en contra de las cuotas obligatorias de redistribución de migrantes entre los estados miembros de la UE, pero respaldamos el principio de voluntariedad en el ámbito de la solidaridad, centrándonos en aquellos que realmente necesitan ayuda internacional", acotó Mikulec durante el encuentro.