La modificación intencionada de las regulaciones es una muy mala señal para la ciudadanía y para los profesionales de la salud que luchan por la vida de los pacientes en condiciones difíciles. Así lo declaró para TASR la presidenta de la República Eslovaca, Zuzana Čaputová, en reacción a la actuación del director nacional de Salud Pública, Ján Mikas, que modificó el reglamento vigente para que los diputados positivos de COVID- 19 pudieran participar en la sesión del Parlamento del 27 de diciembre.
"Con respecto a la situación actual es muy importante cumplir las medidas epidemiólogas, por lo tanto, el comportamiento de las autoridades constitucionales no deberían ser contradictorias a lo que se les exige a los ciudadanos", añadió la presidenta.
Añadió que las reuniones y votaciones online ya son un estándar y que la Asamblea Nacional se pudo ajustar a la situación.
