La compra de la vacuna Sputnik V ha generado fricciones entre los partidos de coalición

A decir del ministro de Asuntos Exteriores, Ivan Korčok, la compra de vacuna rusa pone en duda la orientación de la política exterior de Eslovaquia. Por ello, ha pedido un encuentro entre los máximos representantes constitucionales del país. "Necesito saber que Eslovaquia no ha perdido su rumbo", decía Korčok destacando que la compra de la vacuna rusa podría desembocar en su dimisión. El jefe del partido Smer-SD, Robert Fico, ha declarado que de las reacciones de Korčok es obvio que, "alguien le ha echado una bronca al jefe de la Diplomacia por no cumplir las órdenes". Con ello se refiere a la influencia de los EE UU sobre la política interna de nuestro país. El politólogo, Eduard Chmelár, lo comentaba con estas palabras: "Ahora el Gobierno de Matovič está de verdad amenazado, debido al enojo de la Embajada de los EE UU". La presidenta, Zuzana Čaputová, declaró a este respecto: "La compra de Sputnik V no es un gesto de coraje, ni un éxito diplomático, sino una resignación a las reglas que garantizan la seguridad de nuestros ciudadanos".