El mundo se enfrenta a varias crisis, está en constante cambio y los desafíos son cada vez mayores y más complejos. Por eso, es necesario unirse y cooperar, basándonos en el espíritu de los fundadores del Grupo de Visegrado. Con estas palabras se pronunciaba la presidenta eslovaca, Zuzana Čaputová, el lunes en la cumbre de presidentes de los países miembros del V4, celebrada en la capital de Hungría, Budapest.
Čaputová elogió el acuerdo alcanzado por los presidentes en torno a la iniciativa de hacer un llamamiento a los ciudadanos de sus países para que se vacunen contra el coronavirus. En lo referente a la situación de seguridad en la frontera polaco-bielorrusa, Čaputová dijo que los jefes de Estado del V4 consideran absolutamente inaceptable el uso de los refugiados por parte del régimen bielorruso con fines políticos. Anunció que la República Checa, Hungría y Eslovaquia han expresado su solidaridad con Polonia y ofrecerán asistencia al vecino país si es necesario.
