Después de las energías, las hipotecas y la paga de jubilación extra, la prioridad del Gobierno eslovaco en 2024 será el precio de los alimentos y los productos de primera necesidad. Así lo constató el primer ministro Robert Fico en entrevista para la agencia TASR.
“No voy a construir castillos en el aire. No estoy diciendo que tenga que bajar un 30%, pero nuestro objetivo es ejercer presión sobre la inflación, bajarla para que la gente sienta que con el dinero que están recibiendo, ya sea en forma de salario o jubilación, va a comprar un poco más de comida en las tiendas. Este será el tema número uno para nosotros”, acotó el premier.
Fico recordó que la decisión del gobierno de mantener los precios de la energía en el nivel de 2023 ya ha tenido un impacto importante en la inflación, que a partir del próximo año debería disminuir significativamente. A pesar de ello, dijo que Eslovaquia sigue teniendo una de las tasas de inflación más elevadas de la Unión Europea.