Las víctimas mortales del atentado perpetrado por un estudiante del instituto de Spišská Stará Ves son dos mujeres: una alumna de 18 años y la subdirectora de 51 años. Otra alumna del centro escolar resultó herida de gravedad y fue trasladada a un hospital de la ciudad de Poprad.
El atacante fue detenido por agentes de la Policía y está en prisión preventiva.
El presidente eslovaco, Peter Pellegrini, calificó lo sucedido en el centro educativo de Spišská Stará Ves como una verdadera tragedia.
“Ningún problema del mundo puede resolverse con un cuchillo o cualquier otra arma. La resolución pacífica y civilizada de cualquier disputa, libre de odio y violencia, debe ser el objetivo de toda la sociedad. Cada persona debe contribuir de alguna manera para que la atmósfera y el nivel de las relaciones interpersonales no creen espacio para actos violentos con víctimas humanas”, acotó.
Al mismo tiempo, el presidente expresó sus más sinceras condolencias a los familiares de las personas fallecidas y les deseó una pronta recuperación a los heridos.
El vicepresidente del Parlamento en funciones, Peter Žiga, al referirse al hecho dijo que la sociedad debe condenar cualquier agresión y violencia y volver al respeto mutuo y al respeto a las normas y las autoridades.
El primer ministro Robert Fico también expresó por medio de una nota sus condolencias a los familiares de las víctimas.
Los líderes de los partidos de coalición y oposición, así como las autoridades religiosas han condenado el ataque
