Las autoridades eslovacas y representantes de las principales fuerzas políticas de nuestro país se han pronunciado en torno a la investidura de Donald Trump.
El republicano, que el lunes prestó juramento para su segundo mandato, se ha convertido oficialmente en el cuadragésimo séptimo presidente de Estados Unidos.
El mandatario eslovaco, Peter Pellegrini, confía en que el nuevo inquilino de la Casa Blanca sea capaz de encontrar soluciones diplomáticas conjuntas a los problemas, de manera tal, que el resultado sea beneficioso tanto para Eslovaquia como para EEUU, como corresponde a dos aliados.
El ministro del Interior y líder del partido de coalición Hlas-SD, Matúš Šutaj Eštok, escribía en su cuenta en las redes sociales: “Lo único y más importante que esperamos del nuevo presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, es que traiga la paz a Europa. Esa es la única alternativa hoy, no sólo para Ucrania y Rusia. Es también nuestro interés nacional y económico”.
El partido de oposición KDH, por boca de su portavoz, afirmó que espera que el nuevo presidente de EEUU abogue por una solución pacífica del conflicto en Ucrania, garantías de seguridad para ese país y el mundo entero, y que, al mismo tiempo, evite la polarización de la sociedad estadounidense.
El partido de oposición Eslovaquia Progresista, en relación con la investidura de Trump, ha hecho un llamado al Gobierno a que defina claramente los intereses eslovacos. Según Ivan Korčok, miembro de la dirección del partido, el interés de Eslovaquia hacia EEUU y su nuevo presidente deberá ser, ante todo, la seguridad y la defensa.
