En relación con la cumbre extraordinaria de la Unión Europea sobre el apoyo a Ucrania y la defensa europea convocada para el 6 de marzo en Bruselas, el primer ministro eslovaco Robert Fico ha adelantado que no respaldará la guerra en Ucrania y, por consiguiente, Eslovaquia no brindará ningún tipo de ayuda militar ni financiera a Kiev. Al mismo tiempo, anunció que el 6 de marzo asistirá a la reunión del comité parlamentario de Asuntos Europeos, donde buscará la aprobación de la posición que presentará en la cumbre.
Eslovaquia también propondrá en la cumbre un alto el fuego inmediato que evite que siga muriendo gente y el inicio de negociaciones de paz con Estados Unidos, Rusia y Ucrania. Se espera que los líderes europeos debatan cómo responder al cambio drástico en la política estadounidense hacia la guerra en Ucrania. A la reunión también ha sido invitado el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky.
Michal Šimečka, líder de Eslovaquia Progresista, el principal partido de la oposición, en un comunicado critica la postura del premier y asevera que está aislando cada vez más a Eslovaquia. “Actúa como si estuviera recibiendo instrucciones del presidente ruso, Vladimir Putin”, acotó.
