Acorde con las declaraciones hechas por el vicepresidente ejecutivo de la Asociación de la Industria Automovilística Eslovaca, Pavol Prepiak, tras una reunión con el primer ministro eslovaco, Robert Fico, y representantes del sector automovilístico, los aranceles impuestos por la Administración de Donald Trump podrían, en el peor de los casos, tener un impacto negativo en alrededor de 10.000 empleados del sector automotriz en Eslovaquia.
Prepiak aňadió que aún no se puede estimar el impacto que esto tendrá sobre los beneficios y las ventas de los fabricantes de automóviles.
Durante la conversación con el primer ministro, los representantes del sector del automóvil también discutieron la situación en el país en relación con los paquetes de consolidación y asuntos relacionados con la competitividad interna.
Michal Šimečka, líder del principal partido de la oposición Eslovaquia Progresista, en relación con la celebración de esta reunión, dijo que el primer ministro exige una respuesta unificada de la UE a los aranceles estadounidenses, pero él mismo traiciona dicha unidad con su planeada visita a Moscú.