“La desconexión de la Unión Europea del gas ruso a partir de 2028 plantea un problema objetivo para Eslovaquia“, admitió el canciller alemán Friedrich Merz, añadiendo que estas cuestiones serán objeto de negociaciones en la próxima cumbre de la UE. En una rueda de prensa conjunta con el presidente rumano, Nicospor Dan, el viernes en Berlín, Merz expresó su gratitud a Eslovaquia por permitir la aprobación del 18º paquete de sanciones de la UE contra Rusia. "Se esperaba el consentimiento de Eslovaquia. He hablado con el primer ministro eslovaco Robert Fico dos veces en los últimos días y en este momento quiero expresar una vez más mi sincero agradecimiento a Eslovaquia y a su primer ministro por estar dispuestos a dar su acuerdo ", dijo Merz. Según Fico, sería contraproducente seguir bloqueando el 18º paquete de sanciones, ya que por el momento se han agotado todas las posibilidades de negociación con la CE y persistir en la postura actual pondría en peligro los intereses de Eslovaquia. El presidente de la República Eslovaca, Peter Pellegrini, ha declarado a este respecto: "He sido informado detalladamente del curso de las negociaciones y de las gestiones del Gobierno eslovaco y del primer ministro con las autoridades de la Unión Europea. Estoy convencido de que sin su activo planteamiento, Eslovaquia no tendría hoy absolutamente ninguna garantía de no quedarse sola y sin ayuda europea tras un posible corte de la energía rusa. Por eso, apoyo al primer ministro en sus esfuerzos por negociar las mejores condiciones posibles para el país y luchar por su seguridad energética". El Partido Nacional Eslovaco ha expresado su decepción por el hecho de que Eslovaquia vaya a apoyar otro paquete de sanciones antirrusas. El líder del partido, Andrej Danko, decía: "Nunca en la historia de la Unión Europea se ha ejercido tanta presión por parte de los primeros ministros de otros Estados europeos. Es muy preocupante que la UE continúe con su política antieuropea. En lugar de darse cuenta de que no puede prosperar sin precios energéticos baratos, prosigue su proceso desestabilizador".
Por el contrario, los partidos de oposición dan la bienvenida a la aprobación de las sanciones antirrusas.