La Agencia Nacional Agrícola Eslovaca (PPA por sus siglas en eslovaco) ha revisado 53 establecimientos de alojamiento, cuya construcción fue subvencionada con una contribución de los fondos de la Unión Europea. Según los resultados presentados, en nueve casos fueron detectados irregularidades, en cuatro fue cancelado el contrato y otros seis casos están siendo investigados por los órganos policiales. Los diputados opositores critican dichos resultados, destacando que se trató solamente de un control formal y varias de sus preguntas siguen sin respuestas. A decir de Richard Takáč, ministro de Agricultura, el sondeo opositor en la mencionada agencia fue un politiqueo.
Peter Sabaček Foto: TASR