Esta noche se cumplirán 46 aňos de la invasión del Pacto de Varsovia a Checoslovaquia, que fue una incursión militar realizada por las tropas de cinco países socialistas del Pacto de Varsovia, liderados por la Unión Soviética, en la que invadieron la República Socialista de Checoslovaquia para frenar las reformas de liberalización política de Alexander Dubček, las cuales habían desatado, anteriormente, la Primavera de Praga.
También participaron en la operación militar las tropas de las repúblicas de Polonia, Hungría y Bulgaria. Las tropas de la República Democrática Alemana, aunque listas para la acción, no superaron la frontera de Checoslovaquia — a excepción de un pequeño número de especialistas.
La-transmision-de-la-Radio-Checoslovaca-del-21-de-agosto-de-1968 Máte problém s prehrávaním? Nahláste nám chybu v prehrávači.
Estamos escuchando la grabación de la Radio Checoslovaca del 21 de agosto de 1968, en la cual el locutor anuncia que las tropas del Pacto de Varsovia han pasado las fronteras de Checoslovaquia. Uno de los protagonistas de aquellos acontecimientos históricos fue Alexander Dubček, político eslovaco y que era el símbolo de la llamada Primavera de Praga. Es que en enero de 1968 fue nombrado el primer secretario del Partido Comunista y fue él, quién dirigió el intento de democratización socialista en el país. Su propósito, destinado a democratizar el Estado y las estructuras internas del Partido, y abrir la nación a las potencias occidentales, fue refrendado por una gran parte de la población checoslovaca. Su intento- el socialismo de rostro humano-fue destruído precisamente en agosto de 1968. Habla su hijo Peter, quien murió hace tres aňos. Así que en este caso nos ayudará el archivo de Radio Eslovaca: ”Aquel 21 de agosto estaba en el extranjero, así que sobre la invasión del ejército ruso me enteré solamente a través de los medios de comunicación. Fue algo increíble, incomprensible para mí. Inmediatamente quise contactarme con la familia, pero las líneas telefónicas no funcionaban. Mi primera idea fue volver inmediatamente a casa, sin embargo, tampoco fue posible. Las fronteras estaban vigiladas por las tropas del Pacto de Varsovia y también había gran riesgo de que me detuvieran durante mi viaje desde Egipto.”
Y cómo pasaron aquellos días sus familiares aquí en Checoslovaquia?
“Fue algo muy difícil para todos, dado que en aquel momento no vivíamos juntos y nadie tenía noticias sobre los demás. Y claro, no se sabía nada sobre nuestro padre. Todos fueron vigilados por cuerpos de seguridad. A pesar de lo pesado que era, nos fortalecía mucho la sensación de solidaridad que reinaba entre la gente. Pienso que fue precisamente esa solidaridad la que impidió al partido gobernante adoptar las medidas más brutales.”
En la operación, cuyo nombre en clave fue Danubio, alrededor de 500 civiles fueron heridos y 108 fallecieron. La invasión provocó que las reformas de liberalización fueran detenidas y se reforzase la autoridad del Partido Comunista de Checoslovaquia. Dubček y otros cinco miembros del Presidium fueron secuestrados por la policía soviética de ocupación y llevados a Moscú, donde "se les hizo entrar en razón".
“Sé que la situación fue muy complicada para mi padre, pero he de decir que fue precisamente él quien me servía de apoyo. Era una persona de carácter muy firme, fortalecido por muchas crisis pasadas durante su vida y la vida de nuestra familia. Mis abuelos sabían lo que era la pobreza, tuvieron que irse en búsqueda de trabajo a los EE UU, luego vivieron la guerra mundial. Mi abuelo fue mantenido prisionero en un campo de concetración, mi tío murió en el Levantamiento Nacional Eslovaco, así que mi abuela tuvo que afrontar la muerte de su hijo. Y mi mismo padre fue dos veces herido siendo el participante de la insurrección. Todas son experiencias crueles, pero que a la vez nos han dotado a todos de mucha fuerza.”
Su padre fue enviado a Turquía después de los mencionados acontecimientos, como embajador, y sucesivamente en el aňo 1970 expulsado del partido. Desde entonces trabajó como burócrata en la empresa dedicada a silvicultura y explotación forestal. Nunca dejó de ser perseguido por el aparato estatal, igual como toda su familia. La última pregunta: sus planes hasta el 21 de agosto de 1968 fueron los estudios en la Sorbonna. A pesar de ello, Usted decidió volver a Eslovaquia, a sabiendas que el futuro que les esperaba en nuestro país, sobre todo con su apellido- Dubček, sería poco favorable.
“Sí, me invitaron a estudiar en la Sorbonna, pero debido a lo ocurrido en mi país en agosto de 1968, inmediatamente olvidé aquellos sueňos e hice todo lo posible para estar junto con mis familiares. Y no sólo estar con ellos...Es que no quise perjudicar a mi familia y amigos, dado que los próximos a los emigrantes sufrían luego, durante toda su vida de diferentes tipo de persecuciones y restricciones. Además, quedarme en el extranjero me parecía egoista y una huída de mi responsabilidad, de mis obligaciones. Quiería compartir el destino de mis compatriotas y mis seres más cercanos.”