Con ocasión del Día Internacional de la mujer que conmemoramos la semana pasada iniciamos una serie de segmentos en los que les mostraremos algo de la vida de unas cuantas mujeres eslovacas, adelantadas a su época y que en Eslovaquia supieron abrirse camino en mundos hasta aquel entonces era únicamente masculinos. Iniciamos hoy nuestra serie con la médica y doctora, Mária Bellová.
Maria Bellová nació el 10 de noviembre de 1885 en Liptovský Svätý Peter, como la quinta de siete hijos en la familia del pastor evangélico Štefan Bella, en un tiempo en que, en la pobre Eslovaquia, familias enteras morían de tuberculosis. María incluso perdió a algunos de sus amigos a causa de una enfermedad que era la más grave de aquellos tiempos. Por eso, Mária decidió que quería ayudar a la gente como médico aún y cuando se creía que las mujeres no estaban hechas para el estudio. De hecho, las mujeres en aquel tiempo no tenían acceso a los estudios, escuelas ni universidades, como nos recordaba la historiadora Eva Škorvanková, de la Universidad de Comenius, de Bratislava.
Mária Bellová
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