Entrevista a Peter Hollý Máte problém s prehrávaním? Nahláste nám chybu v prehrávači.
"Luego hice un cambio y empecé a hacer viajes de bajo coste, reduciendo mis gastos. Porque viajar es una actividad maravillosa que requiere una determinada inversión económica. Pero hay distintas maneras de viajar de forma económica y de disfrutar al mismo tiempo."
Paralelamente a los viajes se dedica a la fotografía. De hecho, él mismo se considera un aficionado porque no vive de ello y además invierte bastante en su afición. Bueno, al mismo tiempo ha participado en varios festivales de viajes, celebrados en nuestro país, dando charlas acerca de su participación en una expedición singular, titulada Fjällräven Polar donde vivió una experiencia nórdica a lo grande.
"Durante el viaje que hice con mi mujer por un parque nacional en Suecia encontramos un folleto acerca de una expedición por la tundra ártica que me llamó la atención y me propuse participar. Al final fui aceptado y asistí siendo el único representante eslovaco."
Fjällräven Polar, una marca de ropa y equipamiento de montaña y deporte, es el nombre de la expedición de 300km de longitud que se realiza a través de la tundra ártica. Se trata de un viaje con trineos tirados por perros desde Noruega hasta la Laponia sueca. En el pasado se trataba de un concurso real, hace poco se convirtió en una expedición abierta al público en general. De hecho, entre los objetivos principales de esta iniciativa se encuentra el de ofrecer a la gente común la oportunidad de conocer la singularidad de la vida invernal al aire libre. Cualquiera puede inscribirse grabando un vídeo de presentación personal e ir obteniendo votos a través de las redes sociales. De allí sale un ganador en cada categoría y el jurado elige a otro participante tal y como fue en el caso de Peter.
"La idea principal consiste en disfrutar del ambiente natural. De hecho, los mismos organizadores prefieren elegir a aquellos participantes que no tengan ninguna experiencia con el frío extremo ni ninguna preparación especial. Cada participante recibe ropa y equipamiento adecuado y se le da una formación sobre cómo sobrevivir en estas condiciones. Hay que tener en cuenta varios obstáculos que pueden surgir, y yo mismo tampoco me di cuenta, por ejemplo, de que empezaba a sufrir hipotermia. La expedición se realiza en abril cuando las condiciones meteorológicas no son tan extremas. En fin, hemos tenido que cuidarnos a nosotros mismos y a los perros, también conectados de forma reposada con la naturaleza."
Entre los participantes Peter ha destacado no solo por su origen sino también por el apodo que le fue atribuido por los demás participantes.
"Contaba con el apoyo de Radio y Televisión Eslovacas que se puso en contacto con los organizadores para colaborar en la preparación de un documental sobre mi participación. Me acompañó un pequeño equipo de RTVS que seguía mi rastro por el camino y se centraba también en las condiciones de supervivencia, por ejemplo cómo dormir a treinta y cinco grados bajo cero o cómo derretir la nieve para conseguir agua para beber y cuidar a los perros etc. Como mi apellido es Holly y fui el único participante que estaba acompañado por un equipo de rodaje, los demás me llamaron Hollywood, en broma, desde el primer momento."
Estar en el fin del mundo, vivir una auténtica aventura invernal, recorrer espacios inmaculados y salvajes y conducir el propio trineo con un grupo de perros husky tiene que ser una experiencia inolvidable. ¿Cómo ha sido esta experiencia en realidad?
"Al principio nos dividieron en grupos por cuatro participantes que dirigía un guía local. En nuestro grupo había una chica de Estonia y dos de la República Checa. Cada uno de nosotros disponía de un equipo de trineo compuesto por seis perros de raza husky. Terminé la carrera solo con cinco porque el último día se lesionó uno y lo llevaron al veterinario. En realidad, conducir un trineo ha sido un reto para mí. No me imaginaba como poder subir las colinas con 160 kilos a bordo. Los perros no podían con tanto peso así que tenía que ayudarles empujando el trineo."
El camino, que se recorre normalmente en 4 días, termina en la población de Kiruna, la ciudad más septentrional de Suecia. Peter vivió allí un encuentro inesperado.
"Kiruna es un paraíso para los mushers, o sea para los que se dedican a una forma de transporte nórdico usando perros de tiro y esquís. Allí conocí a dos eslovacos que servían de guías en la expedición. Provienen de la parte oriental de Eslovaquia y se instalaron en Kiruna hace muchos años, formaron una familia y se apasionaron por el mushing, al que se dedican también en la actualidad. De verdad, no esperaba conocer a ningún eslovaco por aquí. Fue una grata sorpresa para mí."
Resumiendo un poco el tema, ¿cuáles son los principales beneficios e inconvenientes que le trajo la expedición?
"No he encontrado ningún inconveniente, al contrario, me he enriquecido mucho gracias a los contactos que he conseguido. Al principio nos reunimos personas de diez países diferentes y tras completar la expedición nos hicimos amigos. Ahora estamos en contacto y nos visitamos. Aparte de las nuevas amistades, he adquirido nuevos conocimientos a pesar de que me muevo bastante por las montañas."
Antes de desearle feliz viaje y suerte en las próximas salidas, le cedo la palabra con un mensaje dirigido a todos ustedes.
"Recomendaría a todos que se deshagan de sus miedos, que estudien un poco del país por adelantado y luego viajar, viajar y viajar. Según mi opinión, lo mejor que podemos hacer es ir conociendo nuevas culturas y rincones desconocidos."