El 29 de agosto de 2014 Eslovaquia festejará el 70 aniversario del inicio de Levantamiento Nacional Eslovaco. Su corta descripción en wikipedia dice: fue una insurrección armada organizada por el movimiento de resistencia eslovaco durante la Segunda Guerra Mundial en contra del Gobierno eslovaco aliado al Tercer Reich. El levantamiento resultó ser un fracaso y los alemanes consiguieron sofocarlo tras dos meses de intensa lucha, pero la guerrilla continuó combatiendo a las fuerzas de ocupación hasta la llegada del Ejército Soviético a Eslovaquia en 1945. En realidad la insurrección fue un evento muy importante para el próximo desarrollo del estado y para la formación de nuestra identidad nacional. Además, destrás de esta característica seca se esconden miles de historias personales, muchas de ellas trágicas, otras heróicas o también las que muestran qué débil puede ser el carácter humano.
Hay muchas canciones que narran las historias de partisanos, es decir de los participantes del levantamiento. Aun los etnólogos han creado un término científico: las canciones partisanas. Es que casi toda la población eslovaca, sobre todo, de Eslovaquia Central y Oriental estuvo de alguna manera en contacto con la insurrección. Habla la etnóloga Eva Krekovičová:
“Las primeras canciones rebeldes surdieron cuando fue establecido el Estado Eslovaco. Por ejemplo la parodia a la marcha Los eslovacos somos de un linaje, que se ha encontrado en la estación policial en Banská Bystrica, dado que allí fue realizado el interrogatorio oficial de un soldado que la había cantado. A la famosa canción de Guardia de Hlinka, organización ultraderechista, le fueron puestas nuevas letras: los eslovacos somos de un linaje de origen muy dudoso, no serviremos nunca para nada, tenemos hombreras de oro y hachas de madera; las elecciones hemos hecho a la fascista, Hitler nos ha tomado todo lo que pudo y Tuka le ayudó.”
Abordemos ahora ya las canciones con la propia temática de la Insurrección Nacional Eslovaca...
“Su mayor parte fue creada después de la sofocación del levantamiento, cuando los partisanos se vieron obligados a escapar a las montaňas, donde vivían escondidos, emprendiendo desde allí diferentes acciones contra el régimen nazi. Pero este tipo de canción nació también mucho más tarde, dado que anualmente se organizaban celebraciones de este acontecimiento histórico y en esas ocasiones eran creadas nuevas y nuevas composiciones.”
Estas canciones bien demuestran cómo el levantamiento irrumpió en las vidas de muchos eslovacos, a menudo cambiándolas irreversiblemente. En una de ellas se canta: una mujer con sus niňos va buscando a su marido y no lo encuentra en ningún lugar; va llorando, dado que se da cuenta de que no podrá ni colocar flores sobre su tumba.
“Les doy otro ejemplo. Se canta- no teníamos ni pan, ni vestido, ni techo. Oh, Dios mío, mira este mundo mísero. En esta canción ya se reflejan las experiencias de la población civil, que formaba parte inseparable del levantamiento. No sólo que influyó indirectamente en la calidad de sus vidas, sino que los ciudadanos también a menudo ayudaban a los partisanos, lo cual muchas veces les costó sus bienes e incluso la vida” aňade Eva Krekovičová.
En aquel entonces se hicieron muy populares también las canciones partisanas de los sovietas:
“Sí. El movimiento contra el fascismo tuvo el carácter internacional, por lo cual también eran a menudo cantadas o adaptadas diferentes canciones de los extranjeros, sobre todo de los rusos, cuyo idioma es bien comprensible para nosotros. Lo confirman las letras de una canción: el combate ha convocado desde todos los lados al eslovaco, al checo, al ruso, al serbio y también al francés para tomar parte en una tropa fraternal, la que lleva el nombre orgulloso- la tropa de los partisanos. Es aquella que lucha por la libertad.”