La República Eslovaca ha asumido por primera vez en la historia de nuestro país la presidencia rotativa del Consejo de la UE durante el segundo semestre de 2016. La presidencia, que fue iniciada por nuestro país el pasado 1 de junio 2016 y termina mañana mismo, tenía que hacer frente a varios retos importantes a nivel europeo, como el brexit, la crisis migratoria y diversos asuntos de seguridad, sobre todo después de los ataques terroristas en París y Bruselas. La presidencia fue preparada por un equipo de unos 230 trabajadores que organizó un total de 1.200 reuniones y gestionó decenas de horas de negociaciones. Así lo aseguró para la agencia TASR el representante permanente de la República Eslovaca ante el Consejo de la UE, Peter Javorčík. "Es una cifra real que incluye todo tipo de encuentros realizados en Bratislava, desde las entrevistas entre ministros hasta las reuniones de grupos de trabajo, incluyendo también la cumbre de Bratislava o la reunión informal de los 27 jefes de Estado o de Gobierno del pasado 16 de septiembre 2016," añadió Javorčík.
El mayor número de reuniones (más de 100) fue llevado a cabo por el equipo de asuntos de economía y finanzas que consiguió aprobar 27 acuerdos y se ocupó también de la aprobación del presupuesto para el año que viene. Por otro lado, el equipo de medio ambiente favoreció la ratificación del Acuerdo de París sobre el cambio climático. El Consejo Europeo siguió proporcionando orientaciones estratégicas sobre las propuestas legislativas conexas.
La mayoría de las negociaciones a nivel de expertos fue realizada por los trabajadores de la Representación permanente de la República Eslovaca en la UE en Bruselas, dirigida por Peter Javorčík. Su agenda consistía, por ejemplo, en preparar materiales de hasta 600 páginas. Dada esta mayor carga de trabajo, el número de empleados de la oficina de la mencionada Representación fue ampliado a más de 230 personas. Muchos de ellos aún seguirán trabajando y dirigiendo varios grupos de trabajo durante la presidencia de turno de Malta. No obstante, la cantidad de trabajadores irá disminuyendo hasta que alcance un número cercano hasta los 90 empleados, un número similar al existente durante la época previa a la presidencia de turno de nuestro país.