Sofia, Jakub, Adam o Nina, son algunos de los nombres preferidos por los padres eslovacos

En los peldaños más altos de los nombres de pila más populares impuestos a los niños nacidos en Eslovaquia encontramos, desde hace ya unos cuantos años, los de Sofia y Jakub. Con todo, en el año 2014 el nombre de Jakub fue sustituido por el de Adam, aunque un par de años después volviese al puesto más alto del mencionado escalafón. Todo ello se encuentra en los datos que el Ministerio del Interior eslovaco ha ofrecido a la agencia de noticias TASR. Así pues, según las mismas estadísticas, los nombres de mujeres más impuestos en la actualidad, concretamente durante los últimos tres años, son los de Sofia, Nina, Natália, Ema, Viktória, Nela, Laura y Elíška. Por otro lado, los nombres más puestos a los varones nacidos en nuestro país son los de Jakub, Adam, Samuel, Michal, Martin, Filip, Matej i Oliver. En el año pasado, en 2018, el nombre de Jakub fue impuesto a 1.264 niños recién nacidos. Por el contrario, el nombre femenino más impuesto en 2018, el de Sofía, se puso únicamente a 722 niñas, lo que representaba un descenso en comparación con el año anterior, 2017, que se había puesto a 1.027 muchachas. En la actualidad, los padres eslovacos tienen la tendencia de poner a sus hijos, a menudo, nombres bastante exóticos. Con todo, si se trata de un nombre relativamente inusual, el ministerio del Interior recomienda a los progenitores el envío de un documento en el que se indique que existe algún Estado en el que este nombre se utiliza. Así mismo, y según las directrices que observa y da el propio ministerio del Interior, el nombre impuesto al pequeño o pequeña no debería ser, en ninguna manera, ni despectivo, ni impersonal. Además, una persona de sexo masculino no debería ser nombrada por una variante femenina, ni viceversa. Con todo, estas normas no se aplican a los nombres extranjeros si es conocido que el uso de dicho nombre está de acuerdo con la tradición del Estado en el que el nombre es habitual. Aunque, tal y como explicaba el ministerio, "a petición de la oficina el registro, el padre del niño debe probar estos hechos a través de un certificado emitido por la representación diplomática del Estado extranjero". Por otra parte, el niño o niña puede recibir más de un nombre, también en lengua extranjera, aunque hay un límite máximo de tres nombres. "Al registrar los nombres en el registro los padres están obligados a ofrecer a la oficina la mayor cooperación e información posible en lo referente al origen del mismo."