La oficina del presidente está dando pasos gradualmente a fin de convertirse en la primera institución con huella de carbono cero en Eslovaquia. Como lo informó la presidenta Zuzana Čaputová, este procedimiento debería terminar en el año 2030. Entre las actividades que incluye la transición a la neutralidad de carbono destaca el aprovechamiento de los vuelos comerciales que la jefa del Estado quiere usar sobre todo en los viajes al extranjero. Para dirigirse a destinos más cercanos Čaputová quiere promover el uso de coches eléctricos o al menos de coches híbridos. Aparte de las tecnologías que preferirá durante la compra, la presidenta optará además por la posibilidad de alquiler que en el resto del mundo representa ya una opción corriente. Si bien el transporte representa la mayor fuente de la contaminación del aire, la oficina presidencial quiere también maximizar la eficiencia energética de edificios que están bajo su administración. "Hay que pensar en la eficiencia energética y en los estándares medioambientales durante cada arreglo o reconstrucción de los edificios. Por ejemplo, sobre el techo del palacio Karáčoni, que es la sede de la oficina del presidente, podrían ser instalados paneles fotovoltaicos y en algunos techos y paredes bien accesibles podrían instalarse algunos elementos de la infraestructura verde", explicó la presidenta. Para compensar la huella de carbono que a pesar de dichas medidas seguirá habiendo, la oficina presidencial se comprometió a plantar cada año 1300 árboles, en cooperación con la empresa de Bosques Estatales de la República Eslovaca y con el Parque Nacional de los Tatras. Al mismo tiempo, la mandataria reveló que habrá altos estándares para los obsequios presidenciales, que también deberán ser ecológicos y estar hechos de materiales reciclables siempre que sea posible.
Asimismo, expresó el deseo de que esta idea pueda convertirse en un buen ejemplo para otras instituciones y no solo eslovacas. Čaputová concluyó su discurso recordando que Eslovaquia se había comprometido a la neutralidad de carbono para el año 2050.