La ministra de Justicia Maria Kolíková se mantendrá desempeñando el cargo que ocupa. Así lo decidieron los diputados eslovacos el lunes.
La moción de censura presentada contra Kolíková no logró salir adelante en el seno del órgano legislativo eslovaco.
Solamente 51 diputados de los 117 que se encontraban presentes en el hemiciclo se pronunciaron a favor de la destitución de la ministra. En contra se manifestaron 63 parlamentarios, dos se abstuvieron y uno no votó.
La reunión extraordinaria para revocar a la ministra había sido solicitada por el partido de oposición Smer-SD. Su líder, Robert Fico, dijo que el motivo de la moción eran las sospechas en torno a la actividad de la empresa Elektronika, en la que figura la ministra. Habló además de clientelismo y conflicto de intereses.
El debate sobre la propuesta de destitución de Kolíková duró todo el día y en él intervinieron cerca de 20 oradores. La ministra recibió el apoyo de los diputados de su partido y de los grupos parlamentarios de SaS y Somos Familia.
Casi la mitad de los diputados de OĽANO, el mayor partido de coalición, se ausentaron de la votación.
Michal Šipoš, jefe del grupo parlamentario de OĽANO, al comentar el asunto dijo que algunos miembros de su partido aún necesitan aclarar ciertas dudas, pero que lo harán en el consejo de coalición, no en público.
Después de la votación, Kolíková agradeció el fuerte apoyo que recibió de su partido, Por la Gente.
