De Tokio regresó todo el equipo de deportistas eslovacos y para evaluar sus resultados obtenidos en los más recientes juegos olímpicos el Comité Olímpico y Deportivo Eslovaco (SOŠV) organizó una rueda de prensa. Para empezar, su jefe, Roman Buček, felicitó públicamente a todos los integrantes del equipo expresando su contento con las cuatro medallas. Muchos de los deportistas que no lograron conseguir una medalla igualmente presentaron en Tokio sus mejores prestaciones. Sin embargo, Buček, centró su atención en la edad de los deportistas eslovacos y pronunció serias preocupaciones relacionadas con el futuro del deporte eslovaco. Para él, las asociaciones deportivas deberían mejorar su trabajo dedicando más atención a la formación de los niños y jóvenes porque la alternancia de generaciones no es para nada un proceso fácil. "El oro ha sido ganado por la mujer de más edad y una de las dos platas por el hombre con más años", enfatizó Buček. El número de deportistas que nos representaron en Tokio fue el más bajo de la historia de Eslovaquia. El secretario general del mencionado comité, Jozef Liba, opina que uno de los problemas realmente consiste en la alternancia generacional. Al mismo tiempo puntualiza, que hay que admitir que en los resultados de los deportistas eslovacos influyó también la pandemia del coronavirus. "Cuando intercambié experiencias con los directivos de otros equipos me enteré de que en Eslovaquia tuvimos las medidas más rigurosas de protección", constató Liba, añadiendo que los que más sufrieron la imposibilidad de entrenarse fueron los nadadores eslovacos.
En total, la representación eslovaca ha conseguido en los Juegos Olímpicos de Tokio cuatro medallas, es decir, la misma cantidad de medallas que en los anteriores juegos de Rio de Janeiro, a pesar de contar con una menor representación. Los medallistas eslovacos en estos Juegos Olímpicos han sido la tiradora Zuzana Rehák Štefečeková con su oro, plata para el piragüista Jakub Grigar en K1 y Rory Sabbatini en golf, y el bronce para los kayakistas de K4, Samuel Baláž, Denis Myšák, Erik Vlček y Adam Botek.