El principal tema de debate debe ser no sólo el plan y la posibilidad de deshacerse de la dependencia de los suministros energéticos monopólicos con los que se financia la guerra, sino también la reducción de la intensidad energética de nuestro país. Así se pronunciaba el lunes el ministro de Medio Ambiente, Ján Budaj, durante la conferencia Independencia Energética de Eslovaquia, en la que se habló de seguridad energética, fuentes de energías renovables y de energía nuclear.
“Nuestros compromisos y objetivos dirigidos a combatir la crisis climática no han terminado ni con la pandemia de la Covid-19 ni con la guerra de Ucrania, por lo tanto, no podemos abandonar las tareas que nos hemos propuesto”, afirmó el jefe de la cartera medioambiental.
A decir de Budaj, en la situación actual Eslovaquia se debe tener un plan de contingencia claro para el caso en haya un cese inesperado de los suministros de gas y petróleo rusos, pero también un plan para ir reduciendo gradualmente la dependencia de los suministros monopólicos. En este contexto, destacó la importancia de un acuerdo europeo y un enfoque común para la obtención de recursos energéticos.
Los activistas ambientales también han valorado positivamente los temas tratados en la conferencia. Aseveran que la dependencia actual del suministro de combustibles rusos es no solo un reflejo de los errores del pasado, sino también la oportunidad de poder corregirlos. El coordinador de la asociación cívica Amigos de la Tierra-CEPA, Juraj Melichár, hizo hincapié en la necesidad de ir abandonando los combustibles fósiles y redirigir los fondos europeos a proyectos que fomenten el uso de recursos renovables, la modernización de las plantas de generación de vapor y el uso de métodos innovadores que reduzcan los costos de calefacción.
En el evento intervinieron además expertos en fuentes de energía sostenibles y alternativas, el decano de la Facultad de Medios de Comunicación de la Universidad Paneuropea y la ex primera ministra eslovaca Iveta Radičová y el ex ministro de Finanzas Ivan Mikloš.