Los salarios del sector educativo se revalorizarán en un diez por ciento a partir del 1 de enero de 2023. Posteriormente, a partir de septiembre de 2023 será del 12%. Así lo afirmó el miércoles en una rueda de prensa el ministro de Finanzas, Igor Matovič. El ministro de Educación, Branislav Gröhling, ha valorado que por fin se hayan escuchado las demandas de aumento salarial de los profesores y otros empleados de la educación. El premier, Eduard Heger, ha declarado que en otoño los trabajadores del sector de la educación también recibirán 500 euros adicionales, una contribución única. Pavel Ondek, presidente del Sindicato de Trabajadores de la Educación y la Ciencia de Eslovaquia, señaló que la alerta de huelga se cancelará. "No hay amenaza de huelga hasta finales de agosto de 2024. Mientras se firme el convenio colectivo, las huelgas no son inminentes", acotaba Ondek, alegando: “El aumento, que alcanzará su punto máximo el 1 de septiembre de 2023, provocará principalmente un incremento de los salarios de los profesores principiantes en unos 250 euros, de los educadores infantiles, así como del personal no docente”.
Monika Uhlerová, presidenta de la Confederación de Sindicatos, dijo que el acuerdo era una especie de compromiso. La negociación ideal, dijo, es aquella en la que ninguna de las partes queda satisfecha. Pero la negociación de un convenio colectivo de mayor nivel es sólo una parte del trabajo, según los responsables del sindicato escolar. Lo que sigue abierto, según Ondek, son las demandas de cambios en la tabla de tarifas del personal no docente, donde algunas tarifas y grados están por debajo del salario mínimo. También hay que abordar la financiación del aumento de los costes de electricidad, la mejora de las infraestructuras escolares y la unificación de la financiación regional de la educación. "Las negociaciones consisten en compromisos, ambas partes han cedido en sus exigencias", concluyó. El partido extraparlamentario Hlas-SD se congratula de los resultados de la negociación colectiva entre el Gobierno y los sindicatos. Sin embargo, el líder del partido, Peter Pellegrini, considera que la subida salarial es una reacción a las protestas de los maestros, más que un esfuerzo sincero del Gobierno por resolver los problemas sociales acumulados. Al mismo tiempo, pide al Gabinete que se ocupe de la situación de las personas mayores y de los trabajadores. Michal Rehúš, analista del Centro de Análisis Educativos, opina: “El aumento acordado en los salarios de los profesores es poco ambicioso. Es un error que este año no se haya producido un aumento más significativo de los salarios de los profesores. Por lo tanto, incluso este aumento aparentemente más significativo de los salarios de los profesores no puede considerarse un aumento del atractivo de la profesión de maestro. Es sólo un parche para la inflación, y quizás no sea suficiente".
