Los extranjeros ayudan a Eslovaquia a resolver el desequilibrio en el mercado laboral

El número de extranjeros que trabajan en Eslovaquia continúa aumentando. El aumento de su número se aceleró sobre todo con el conflicto bélico en Ucrania. En algunos eslovacos quizás exista el temor de que “los extranjeros nos están robando los puestos de trabajo”. Sin embargo, Andrej Martiška, analista de un renombrado banco, constató que las cifras son claras y confirman que es un disparate. Según los datos de la cartera de Trabajo, Familia y Asuntos Sociales, en agosto trabajaron en Eslovaquia cerca de 83.000 extranjeros. De entre ellos, los más representados son los ucranianos, con más de 30 mil. En su mayoría se trata de personas huídas de su patria por la guerra que en Eslovaquia encontraron un nuevo hogar o un trabajo temporal. Según dicho analista, los datos demuestran que los extranjeros contribuyen a reducir la escasez de mano de obra allí donde es un problema encontrarla. De hecho, trabajan casi exclusivamente en las regiones donde hay una escasez de la mano de obra a largo plazo. Más del 75% de los extranjeros trabaja en las cuatro regiones con el menor desempleo, la mitad de ellos en las regiones de Bratislava y Trnava. "Los datos del mercado laboral son claros: los extranjeros trabajan en nuestro país, sobre todo, en las regiones donde el desempleo es más bajo y hay más vacantes, y lo hacen principalmente en profesiones para las que no hay suficientes empleados en las regiones en cuestión. Por lo tanto, los extranjeros no nos roban los puestos de trabajo. Por el contrario, nos ayudan a resolver el desequilibrio del mercado laboral, apoyando así nuestra economía y elevando nuestro nivel de vida", explicó el analista. Sin embargo, dijo que las cifras también demuestran que, a pesar del mayor número de trabajadores extranjeros de la historia, sigue habiendo una importante escasez de mano de obra en algunas regiones y profesiones, lo que está frenando nuestra economía. Así, concluyó el analista, la economía eslovaca necesita aún más extranjeros, capaces y dispuestos a trabajar en profesiones y regiones donde no tenemos suficientes empleados.