Los hogares eslovacos gastan una quinta parte de su presupuesto familiar en comida y los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas en Eslovaquia son los séptimos más bajos de la UE. El gasto de los hogares europeos en comida no llega ni siquiera al 15 % del gasto total. Acerca de este asunto habla Eva Sadovská, analista de Wood & Company, en un estudio publicado recientemente.
Sadovska señala que los precios de los alimentos han subido significativamente este año. “En los primeros nueve meses de 2022 la inflación promedio de alimentos alcanzó el 15,7 % y en septiembre incluso pagamos hasta 23,3 % en alimentos y bebidas no alcohólicas. Los aceites, grasas, el pan, la bollería, los lácteos y las carnes registraron el aumento de precios más significativo", precisó.
Por otro lado, asevera que, aunque la mayoría de los eslovacos tiene acceso a muchos alimentos, tener un almuerzo completo cada dos días no es algo común y corriente para casi un 12 % de la población.
A decir de Sadovská, este problema afecta principalmente a personas mayores que viven solas y a hogares donde convive un adulto con varios menores.
La analista admite que mientras algunos eslovacos no pueden permitirse un almuerzo completo, hay otros que desperdician comida. "En términos generales, un eslovaco genera aproximadamente 100 kilogramos de desperdicio de alimentos al año, es decir, 0,27 kg por día. Estos residuos de alimentos se generan principalmente en los hogares. La mayoría de las veces se trata de pan, pasteles, frutas, verduras, productos lácteos y restos de comida cocinada", afirmó la analista, añadiendo además que un eslovaco medio cada año tira a la basura restos de comida o alimentos caducados por valor de entre 100 y 150 euros.