La cartera de Economía, refiriéndose a su lucha contra el encarecimiento de la energía, informó que el Estado no se ha olvidado de los consumidores de energía medios, es decir, de los que no forman parte ni de las grandes empresas, ni de los hogares. En realidad, se trata de pequeñas empresas y organizaciones con un consumo anual no superior a 30 megavatios/hora de electricidad y 100 megavatios/ hora de gas, que próximamente podrán responder a una convocatoria. "Se trata de la continuación de la asistencia ofrecida en el marco del Programa Temporal de Crisis destinado a ayudar a la economía nacional afectada por la agresión de Rusia contra Ucrania. La ayuda ha sido puesta en marcha ya durante diciembre de 2022", declaró Mária Pavlusík, portavoz del ministro de Economía. El ministerio ha subrayado en repetidas ocasiones que los ayuntamientos también pueden solicitar las ayudas por el pago de la energía más cara. Pueden solicitar compensaciones por los elevados precios de la energía todas las entidades que desarrollan alguna actividad de economía. La Oficina de Regulación de las Industrias de Red advirtió que ha fijado los precios regulados de electricidad y de gas para estos consumidores “vulnerables”. Sin embargo, cualquier compensación financiera no entra dentro de sus competencias legales. "Las recompensas forman parte de las medidas de emergencia adoptadas por el gobierno. Nosotros recomendamos ponerse en contacto con el ministerio de Economía, que ha anunciado sus planes de ayuda a los consumidores no domésticos para compensar el aumento del coste de la energía", declaró el portavoz de dicha oficina, Radoslav Igaz.
Los consumidores, cuyo consumo anual no supera los 30 megavatios-hora de electricidad y los 100 megavatios-hora de gas, y cuyos precios fija la autoridad reguladora, ya reciben de sus proveedores de energía anticipos varias veces superiores. El presidente del comité parlamentario de Economía, Peter Kremský, advirtió de que los pequeños empresarios y diversas asociaciones, así como los pequeños municipios, han empezado a recibir desde principios de enero "noticias brutales". "Se llama factura anticipada de electricidad, cuyo precio es entre 500 y 650 euros por megavatio-hora sin IVA, o sea, aproximadamente entre 5 y 6 veces más que el año pasado", señaló Kremský, según el cual este es el resultado de la regulación del sector energético y del mercado de la electricidad tal y como funciona en Eslovaquia.