Eslovaquia y Polonia apuestan por una cooperación más estrecha en el ámbito de la defensa, incluyendo la producción de municiones y equipos de combate. Así lo anunciaron los ministros de Defensa de Eslovaquia y de Polonia, Robert Kaliňák y Wladyslaw Kosiniak-Kamysz, respectivamente, tras la firma de un acuerdo sobre la intención de fortalecer la cooperación en la industria armamentística.
Acorde con el ministro de Defensa polaco, las negociaciones abarcaron cuatro áreas. En primer lugar, mencionó el interés de Eslovaquia en los sistemas de defensa aérea portátiles polacos Piorun. También se refirió al fortalecimiento de las actividades conjuntas en el campo de la producción de municiones de calibre 155 mm. El tercer ámbito es la posibilidad de producción conjunta de un vehículo blindado de transporte de personal basado en el vehículo polaco Rosmak con una torreta eslovaca.
Como último punto, mencionó el interés de Eslovaquia en los tanques coreanos K-2, que los polacos producirán en una versión modificada en su país.
Robert Kaliňák, por su parte, describió a Polonia como un líder que no esperó por la OTAN ni un cambio en la Casa Blanca para desarrollar su industria militar, y que ya ha cumplido con sus límites de gasto de defensa.
Con motivo del tercer aniversario de la invasión rusa a Ucrania, ambos elogiaron el heroísmo de los soldados ucranianos, condenaron la violación del derecho internacional y destacaron la necesidad de una paz justa que preserve una Ucrania soberana y libre.
Según el ministro eslovaco, las diferencias con su interlocutor en algunas cuestiones relacionadas con la agresión al vecino país son resultado de diferentes experiencias históricas. "La historia de Polonia con la Unión Soviética es mucho más dramática", añadió.
En opinión de Kaliňak, no debería sorprender que EEUU no haya invitado hasta ahora a la UE a las negociaciones con Rusia, cuando la Unión tiene una doctrina que prohíbe las negociaciones con ese país. Su homólogo polaco, a este respecto, resaltó que la seguridad debe ser una prioridad en la UE y es necesario demostrarlo no sólo con palabras.