Los panaderos se niegan en redondo a añadir insectos a sus productos

Los fabricantes, miembros de la Unión Eslovaca de Panaderos, Pasteleros y Reposteros rechazan absolutamente cualquier adición de insectos a sus productos. No fabricarán productos con tales aditivos, aunque se lo pidan las cadenas de supermercados. Así lo confirmó una resolución conjunta de la asamblea general de la asociación, celebrada el jueves en Donovaly. Milan Lapšanský, presidente de la junta directiva del sindicato, informó de ello el miércoles. ”Si alguien quiere comer gusanos picados, que busque en las estanterías productos de Europa Occidental, que las cadenas importan a granel. Desde luego, no encontrará tales ingredientes en los eslovacos. En la asamblea general de la semana pasada, los miembros de la Unión Eslovaca de Panaderos, Pasteleros y Reposteros acordaron por unanimidad no añadir gusanos ni otros insectos en polvo a sus recetas de probada eficacia”, subrayó Lapšanský. Añadió que Eslovaquia es totalmente autosuficiente en la producción de trigo y que el sindicato no ve ningún motivo para que nadie realice pruebas con los consumidores eslovacos. Esta declaración responde a la aprobación del polvo de larvas enteras del gusano de la harina como nuevo alimento autorizado para su uso en la Unión Europea, que también ha autorizado su empleo en productos de panadería. Por ejemplo, un panecillo o pan contendría un máximo de cuatro gramos de dicho polvo. El uso de este denominado “nuevo alimento” debe ir seguido de una etiqueta en el envase del producto. ”La justificación de las implicaciones ecológicas o morales tiene sus límites. No hay estudios relevantes sobre el impacto del consumo a largo plazo de gusanos en los seres humanos. No vamos a sucumbir a las presiones de los ecologistas ni de las cadenas a este respecto”, afirmó Lapšanský. La Unión Eslovaca de Panaderos, Pasteleros y Reposteros agrupa a productores de toda Eslovaquia. Cuenta con más de 520 miembros, desde panaderos autónomos hasta grandes panaderías de todas las regiones de Eslovaquia. Los miembros del sindicato suministran la mayor parte del pan, la bollería, la pastelería y la pasta y emplean a más de 12.200 trabajadores.