El Gobierno considera la supresión de festivos como forma de consolidación

Según afirmó ayer domingo el primer ministro, Robert Fico, en rueda de prensa, el gobierno que dirige podría plantearse la supresión de una fiesta civil y otra religiosa con el fin de lograr una mejor consolidación presupuestaria. Al respecto, y en la misma rueda de prensa, el presidente del Gobierno eslovaco volvió a hacer hincapié en el hecho de que el criticado impuesto sobre transacciones bancarias es una herramienta necesaria, sin la cual el Gabinete no podría llevar a cabo la mencionada consolidación. Con él, explicaba, el Gobierno quiere conseguir 700 millones de euros para el presupuesto del Estado y consolidar así las finanzas públicas. En su discurso, Fico, reconocía haberse mirado con atención la propuesta de la Unión Republicana de Empresarios (RÚZ, en sus siglas eslovacas) en la que se indican y realizan diversas propuestas con el objetivo de consolidar las finanzas públicas. Entre otras, destacó la propuesta de fusión de oficinas estatales, o la de reducción en un 15 % del número de empleados en la administración pública. Con todo, indicó que todas estas son medidas a largo plazo, que no pueden realizarse de aquí a final de año. Sin embargo, Fico afirmó que entre las propuestas de la Unión Republicana de Empresarios hay una, en forma de supresión de días festivos, que podría discutirse. “Tenemos uno de los números de festivos más alto de todo el mundo, catorce. Si la supresión de cada festivo aporta 150 millones de euros al presupuesto del Estado esta podría ser la alternativa para suprimir una parte del impuesto sobre transacciones”. Según Fico, la supresión de una parte del impuesto sobre transacciones haría perder a las arcas del Estado unos 200 o 300 millones de euros. A cambio de ello, afirmaba, se puede ofrecer la alternativa de suprimir un día festivo de carácter civil y otro religioso, explicaba. Sobre la propuesta del Partido Nacional Eslovaco para la modificación del impuesto sobre transacciones para empresarios autónomos y pequeñas empresas con un volumen de negocio de hasta 100 000 euros que actualmente se encuentra en el Parlamento, afirmó que el Gobierno se encuentra dispuesto a negociarla. Sin embargo, el primer ministro afirmaba que no ve alternativa para la obtención de dinero necesario para la consolidación si se aprueba dicha propuesta del Partido Nacional. Según Robert Fico, si ésta es una alternativa real para la obtención de 200 o 300 millones de euros se puede ajustar el impuesto, pero lo que no es opción posible es romper la consolidación. “Ahora, pues, toca hablar de los días festivos”, concluyó.